Cajamarca es una tierra donde la historia se une a la naturaleza para crear una experiencia inolvidable. Encuentra en esta región una magnífica arquitectura colonial, pueblos coloridos y una gastronomía digna de admirar. ¡Definitivamente aquí lo pasarás bien!. Visítala!!!

Lugares Turísticos

Mirador de Santa Apolonia

El Mirador de Santa Apolonia, está ubicado en el cerro Santa Apolonia donde se puede observar la preciosa vista de la ciudad y todo su esplendor. En el mirador destacan bellas escalinatas y jardines y una capilla de Santa Apolonia que es celebrada el día de la Virgen de Fátima (13 de mayo). En sus linderos se pueden apreciar aún vestigios de edificaciones pre-hispánicas, entre ellas la famosa “Silla del Inca” que está formada por dos bloques de piedra que afloran del mismo cerro, que han sido tallados para darle su forma actual.

Ventanillas de Otuzco

A tan solo 8 kilómetros de la ciudad de Cajamarca, en el distrito Baños del Inca, se ubica el famoso sitio arqueológico Las Ventanillas de Otuzco. Con una antigüedad que se remonta a los primeros siglos de nuestra era, esta necrópolis preinca destaca en medio de la naturaleza de la zona norte de la sierra del Perú y se ha convertido en uno de los sitios turísticos más atractivos del departamento de Cajamarca

Baños del Inca

El balneario de aguas termales está ubicado a 6 kilómetros de Cajamarca con temperaturas que llegan hasta los 79ºC. Por el confort de su establecimientos y propiedad curativas de sus fuentes son considerados como los más importantes del continente, tanto por la bondad de sus aguas, como por el trasfondo histórico que representan, pues allí se aseaba y relajaba tanto Pachacútec a su paso conquistador, como Túpac Yupanqui y sus hijos Huáscar y Atahualpa; siendo este último el anfitrión de Francisco Pizarro cuando fue conquistada Cajamarca en el año 1532.

Cumbe Mayo

Esta ubicado 20 Km. al suroeste de Cajamarca y a una altitud de 3500 metros sobre el nivel del mar. Se trata de una zona arqueológica rodeada de un pintoresco paisaje que alberga numerosas formaciones geológicas en forma de bosque de piedras o farallones, siendo las formas más conocidas las que semejan siluetas de frailes en silenciosa procesión, razón por la cual estas formaciones rocosas han adquirido el apelativo de “fraylones”.